Acabas de dar a luz y tanto tu cuerpo como tu mente experimentan una oleada de cambios que no sabes muy bien como afrontar, es la llamada cuarentena y en este artículo te vamos a dar algunas claves para afrontarla.
La cuarentena es un periodo que suele durar entre 6 y 8 semanas después del parto y en el que todos los cambios que has experimentado durante el embarazo van a ir remitiendo poco a poco.
Durante el postparto más inmediato vas a sentir los llamados loquios, es un sangrado que comienza siendo rojo intenso para ir poco a poco adquiriendo un tono marrón hasta que se vuelve blanquecino y termina desapareciendo. Este sangrado es indicativo de que tu útero está cicatrizando correctamente y que los restos de placenta están siendo expulsados. Si los loquios se vuelven verdosos o malolientes deberías acudir al ginecólogo ya que es signo de infección. Junto con los loquios sentirás también los famosos entuertos que son unos dolores de tipo retortijón que indican que tu útero está volviendo a su tamaño original.
Si te han hecho una episiotomía deberás tener especial cuidado los primeros días con los puntos, mantener una higiene adecuada y evitar la humedad en la herida te ayudará a que cicatrice mejor. Es normal que al principio sientas molestias pero si esas molestias persisten después de que los puntos se hayan cerrado del todo deberías acudir a un especialista.
Es normal que aparte de estos síntomas que acabamos de mencionar sientas un cansancio extremo. La pérdida de sangre durante el parto, la falta de horas de sueño, la caída en picado de las hormonas o la ansiedad que supone la llegada de un nuevo miembro a la familia no ayudan a que podamos afrontar el postparto con energía. Esto se conoce como depresión postparto y normalmente remite a los pocos días. La madre se siente superada por la nueva situación que está viviendo y llega a plantearse dudas tales como si será capaz de cuidar a su hijo. Es fundamental contar con la ayuda de la pareja o los familiares en este momento para descargar de responsabilidades y ocupaciones a la madre. Si esos sentimientos de tristeza no remiten en unos meses lo mejor es acudir a un psicólogo que nos ayudará a superarlo.
Otro tema que genera bastantes dudas en las mamás recientes es la reanudación de las relaciones sexuales. Lo mejor es esperar a que la episiotomía (en caso de haberla) esté totalmente cicatrizada y a que el ginecólogo tras una revisión nos de luz verde. Pero es muy importante también esperar hasta que ambos miembros de la pareja estén de acuerdo y decididos a reanudar la actividad sexual. Es normal que al principio haya dudas o miedo al dolor, por eso es tan importante que los dos se sientan cómodos y relajados. Hay que tener especial precaución y tomar medidas anticonceptivas ya que la ausencia de la menstruación no nos asegura que no pueda producirse un nuevo embarazo.
Durante el embarazo se producen muchos cambios en la madre que después del parto tienen que ir volviendo a la normalidad poco a poco. Por este motivo hay que tener en cuenta que necesitamos darnos tiempo para tener una buena recuperación tanto a nivel físico como a nivel psicológico.
